Tu hijo, tu nieto o alguien en un momento muy especial ... ¡Cuántas veces te lo han pedido!
De eso se trata, de cuentos de los clásicos que casi siempre adaptamos al momento que nos lo solicitan, o de los que nos inventamos.
Lo bueno si es breve mejor.
Sin vergüenza, sin temor. ¡ Si hablas ya haces literatura !
¡ Atrévete!
Empiezo Yo:
Érase una vez una princesa muy bella e inteligente llamada Carlota. Estaba en la edad casadera y la fama de su belleza corrió por todos los reinos. Los príncipes herederos acudían a sus bailes y quedaban prendados de su belleza. ¡Todos querían casarse con ella!, cosa que parecía molestar a la princesa.
Se continuaron celebrando muchos y maravillosos bailes, pero la bella Carlota no se decidía por ninguno de sus numerosos pretendientes.
Sus padres, el rey y la reina, empezaron a molestarse: ... "tienes que decidirte, el reino necesita sabia joven". Incluso la amenazaron con encerrarla en un convento.
Finalmente Carlota cedió y comunicó a sus pretendientes que se casaría con el que consiguiera el regalo más bello del mundo.
Pronto en palacio se empezaron a recibir los más bellos presentes, cofres llenos de joyas, espléndidos vestidos, majestuosas carrozas, veloces caballos tan blancos como la nieve, perfumes, exóticas flores de mil colores ... y más, mucho más, todo lo que podáis imaginar.... incluso un príncipe le envió los más exquisitos pasteles.
Llego el día del gran acontecimiento. Carlota tenía que decidirse.
Todos los príncipes desfilaron ante Carlota presentando y elogiando sus propios regalos, para ser ellos los elegidos. Finalmente un príncipe se postró ante ella con las manos vacías.
- Princesa, he viajado por todo el mundo buscando las cosas más bellas y originales, pero nada me ha convencido. Es normal, porque el recuerdo de vuestra belleza me acompañaba y nada logró superarla.
¡ Vos sois lo más bello!
Naturalmente Carlota se casó con él.
Y colorín colorado este cuento se ha acabado.
Y ahora cuéntame tú un cuento ....
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